¿QUÉ ES LA TRISTEZA Y CÓMO GESTIONARLA?
La tristeza es una emoción que nos sirve para enfrentarnos a algún tipo de pérdida o una situación adversa que sentimos que nos supera. Nos permite establecer distancia con las situaciones dolorosas para impulsar la interiorización y cicatrización del dolor generado por ellas. Es una emoción útil aunque dolorosa puesto que es el punto de arranque del proceso de aceptación de una realidad que nos daña.
En estos momentos es normal que nos sintamos tristes, porque nuestras vidas se han visto afectadas por la actual crisis sanitaria, teniendo que perder muchas de nuestras rutinas habituales, nuestras aficiones, el contacto con seres queridos, etc.
Del mismo modo, es normal que nuestras hijas e hijos se sientan así. No tienen contacto con sus amistades, se encuentran sin posibilidad de salir a la calle y poder relacionarse. Además, no es raro que echen de menos a otras personas de la familia.
Al igual que con otras emociones, lo mejor que podemos hacer es hablar con ellos y ellas de nuestras propias emociones, haciéndoles ver cómo nos sentimos. Esto facilita a su vez que vean con normalidad hablar de cómo se sienten y les resulte más sencillo identificar lo que están sintiendo en cada momento y expresar de manera adecuada de sus emociones.
En el siguiente vídeo podéis encontrar más información sobre qué es la tristeza, qué papel desempeña en el desarrollo emocional y algunos consejos para ayudar a nuestros hijos e hijas a gestionar este sentimiento. Aunque quizás los motivos de la tristeza sean ligeremente diferentes en la infancia y en la adolescencia, la gestión de la emoción es la misma para todas las etapas de la vida.
Recuerda que la educación emocional es crucial para el desarrollo adecuado de las personas. Cuanto antes comencemos hablando de emociones, más protegidos estarán nuestros hijos e hijas.
En estos momentos es normal que nos sintamos tristes, porque nuestras vidas se han visto afectadas por la actual crisis sanitaria, teniendo que perder muchas de nuestras rutinas habituales, nuestras aficiones, el contacto con seres queridos, etc.
Del mismo modo, es normal que nuestras hijas e hijos se sientan así. No tienen contacto con sus amistades, se encuentran sin posibilidad de salir a la calle y poder relacionarse. Además, no es raro que echen de menos a otras personas de la familia.
Al igual que con otras emociones, lo mejor que podemos hacer es hablar con ellos y ellas de nuestras propias emociones, haciéndoles ver cómo nos sentimos. Esto facilita a su vez que vean con normalidad hablar de cómo se sienten y les resulte más sencillo identificar lo que están sintiendo en cada momento y expresar de manera adecuada de sus emociones.
En el siguiente vídeo podéis encontrar más información sobre qué es la tristeza, qué papel desempeña en el desarrollo emocional y algunos consejos para ayudar a nuestros hijos e hijas a gestionar este sentimiento. Aunque quizás los motivos de la tristeza sean ligeremente diferentes en la infancia y en la adolescencia, la gestión de la emoción es la misma para todas las etapas de la vida.
Recuerda que la educación emocional es crucial para el desarrollo adecuado de las personas. Cuanto antes comencemos hablando de emociones, más protegidos estarán nuestros hijos e hijas.
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