¿CÓMO GESTIONAR EL USO DE LAS TIC DESDE LOS 0 HASTA LOS 12 AÑOS?
En una entrada anterior de nuestro Blog, hablábamos de la importancia de utilizar algunas estrategias para fomentar un uso positivo y seguro de Internet. Concretamente, hablábamos de dos estrategias, la supervisión y el establecimiento de normas y límites. A continuación vamos a profundizar en estas estrategias mediante recomendaciones para la utilización de Internet y pantallas, según las edades de nuestros hijos e hijas.
En esta primera etapa, debemos evitar o limitar todo lo posible el contacto con las pantallas.
• Tiempos cortos y esporádicos. Establecer normas desde el principio relativas al tiempo de uso.
• Seleccionar muy cuidadosamente los contenidos, eligiendo aquellos adecuados y recomendados para su edad. Para llevar a cabo esta tarea es muy útil conocer el código PEGI (Pan European Game Information) que es un sistema europeo para clasificar el contenido de los videojuegos y otro tipo de software de entretenimiento.
• Acompañarles siempre durante la actividad, con explicaciones adecuadas a su comprensión.
• Configurar herramientas de control parental en todos los dispositivos que utilice.
En esta etapa sigue siendo necesaria una estrecha supervisión para asegurar que se está haciendo un uso seguro y responsable, así como el mantenimiento de normas y límites de uso. A su vez, se recomienda ir ampliando los usos y las buenas prácticas asociadas:
• Preparar entornos TIC controlados con conexión a Internet limitada, para ello se pueden utilizar las soluciones de control parental disponibles en los dispositivos que vayan a utilizar (teléfonos, tabletas, ordenadores, consolas, Smart TV).
• Elegir videojuegos adecuados a la edad, seleccionándolos mediante el código PEGI.
• Facilitar y enseñarles a identificar contenidos de calidad adaptados a su edad y que les ayuden a desarrollar sus habilidades, a fomentar la creatividad y la participación activa.
• Profundizar en el uso responsable de Internet. A esta edad es necesario remarcar aspectos como el cuidado de la privacidad, la protección de dispositivos y el espíritu crítico ante la información que puedan encontrar. Además, se debe comenzar a dar importancia a su socialización y el contacto con otras personas a través de Internet.
En esta etapa comienzan a utilizar Internet de forma intensiva: Despiertan su interés las redes sociales, demandan un móvil propio y sienten fascinación por los juegos en línea. Es una etapa perfecta para que aprendan y desarrollen las habilidades necesarias que les permitan tomar decisiones apropiadas de forma independiente.
Para facilitar este aprendizaje y continuar acompañando y supervisando esta evolución, las familias deben adaptar, en función de la edad y la madurez, la normativa familiar existente sobre el uso de las TIC e Internet de forma consensuada. Asimismo, se recomienda:
• Facilitar entornos TIC controlados, pero cada vez más abiertos. Las familias deben mantener entornos controlados que minimicen los riesgos, prestando especial atención a los controles parentales de teléfonos móviles y consolas. Es probable que en estas edades se empiecen a generar conflictos en relación al uso de los controles parentales, por lo que en función de la madurez y de las responsabilidades que vayan asumiendo los y las menores, se recomienda ir poco a poco eliminado las restricciones.
• Elegir videojuegos adecuados a la edad, utilizando para ello la clasificación de los mismos mediante el código PEGI.
• Decidir sobre la tenencia de pantallas propias. A pesar de la presión social que pueda existir, cada familia debe valorar si el o la menor tiene suficiente madurez como para tener su propio móvil. Llegado el momento, se deben consensuar las normas de uso y abordar posibles problemas que se pueden dar.
• Prevenir y resolver situaciones conflictivas. Es en esta franja de edad cuando los casos de ciberacoso aumentan, debido a la entrada en las redes sociales. Del mismo modo, aparece la curiosidad por la sexualidad, trayendo consigo riesgos como la sextorsión o grooming. Por ello, es importante trabajar estas temáticas de manera anticipada, fomentando que acudan a personas adultas si existe un problema.
• Insistir sobre las buenas prácticas de uso. En esta franja de edad ya deben tener una idea clara de las pautas necesarias para una navegación segura: Comportarse en línea (netiqueta), gestionar adecuadamente su privacidad e identidad digital, protegerse ante virus y fraudes, y la seguridad de los dispositivos.
Echa un vistazo al siguiente vídeo para saber más sobre la netiqueta. También puedes utilizarlo para enseñarles a tus hijos e hijas cómo comportarse en línea.
PRIMERA ETAPA INFANTIL (DE 0 A 2 AÑOS)
En esta primera etapa, debemos evitar o limitar todo lo posible el contacto con las pantallas.
SEGUNDA ETAPA INFANTIL (DE 3 A 5 AÑOS)
• Tiempos cortos y esporádicos. Establecer normas desde el principio relativas al tiempo de uso.
• Seleccionar muy cuidadosamente los contenidos, eligiendo aquellos adecuados y recomendados para su edad. Para llevar a cabo esta tarea es muy útil conocer el código PEGI (Pan European Game Information) que es un sistema europeo para clasificar el contenido de los videojuegos y otro tipo de software de entretenimiento.
• Acompañarles siempre durante la actividad, con explicaciones adecuadas a su comprensión.
• Configurar herramientas de control parental en todos los dispositivos que utilice.
PRIMERA ETAPA DE EDUCACIÓN PRIMARIA (DE 6 A 8 AÑOS)
En esta etapa sigue siendo necesaria una estrecha supervisión para asegurar que se está haciendo un uso seguro y responsable, así como el mantenimiento de normas y límites de uso. A su vez, se recomienda ir ampliando los usos y las buenas prácticas asociadas:
• Preparar entornos TIC controlados con conexión a Internet limitada, para ello se pueden utilizar las soluciones de control parental disponibles en los dispositivos que vayan a utilizar (teléfonos, tabletas, ordenadores, consolas, Smart TV).
• Elegir videojuegos adecuados a la edad, seleccionándolos mediante el código PEGI.
• Facilitar y enseñarles a identificar contenidos de calidad adaptados a su edad y que les ayuden a desarrollar sus habilidades, a fomentar la creatividad y la participación activa.
• Profundizar en el uso responsable de Internet. A esta edad es necesario remarcar aspectos como el cuidado de la privacidad, la protección de dispositivos y el espíritu crítico ante la información que puedan encontrar. Además, se debe comenzar a dar importancia a su socialización y el contacto con otras personas a través de Internet.
SEGUNDA ETAPA DE EDUCACIÓN PRIMARIA (DE 9 A 12 AÑOS)
En esta etapa comienzan a utilizar Internet de forma intensiva: Despiertan su interés las redes sociales, demandan un móvil propio y sienten fascinación por los juegos en línea. Es una etapa perfecta para que aprendan y desarrollen las habilidades necesarias que les permitan tomar decisiones apropiadas de forma independiente.
Para facilitar este aprendizaje y continuar acompañando y supervisando esta evolución, las familias deben adaptar, en función de la edad y la madurez, la normativa familiar existente sobre el uso de las TIC e Internet de forma consensuada. Asimismo, se recomienda:
• Facilitar entornos TIC controlados, pero cada vez más abiertos. Las familias deben mantener entornos controlados que minimicen los riesgos, prestando especial atención a los controles parentales de teléfonos móviles y consolas. Es probable que en estas edades se empiecen a generar conflictos en relación al uso de los controles parentales, por lo que en función de la madurez y de las responsabilidades que vayan asumiendo los y las menores, se recomienda ir poco a poco eliminado las restricciones.
• Elegir videojuegos adecuados a la edad, utilizando para ello la clasificación de los mismos mediante el código PEGI.
• Decidir sobre la tenencia de pantallas propias. A pesar de la presión social que pueda existir, cada familia debe valorar si el o la menor tiene suficiente madurez como para tener su propio móvil. Llegado el momento, se deben consensuar las normas de uso y abordar posibles problemas que se pueden dar.
• Prevenir y resolver situaciones conflictivas. Es en esta franja de edad cuando los casos de ciberacoso aumentan, debido a la entrada en las redes sociales. Del mismo modo, aparece la curiosidad por la sexualidad, trayendo consigo riesgos como la sextorsión o grooming. Por ello, es importante trabajar estas temáticas de manera anticipada, fomentando que acudan a personas adultas si existe un problema.
• Insistir sobre las buenas prácticas de uso. En esta franja de edad ya deben tener una idea clara de las pautas necesarias para una navegación segura: Comportarse en línea (netiqueta), gestionar adecuadamente su privacidad e identidad digital, protegerse ante virus y fraudes, y la seguridad de los dispositivos.
Echa un vistazo al siguiente vídeo para saber más sobre la netiqueta. También puedes utilizarlo para enseñarles a tus hijos e hijas cómo comportarse en línea.
¿Estás utilizando alguna de estas estrategias? ¿Cambiarías alguna de las estrategia que pones en marcha habitualmente?
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