DÍA MUNDIAL SIN TABACO

Ayer, 31 de mayo, se celebró el Día Mundial sin Tabaco, que la Organización Mundial de la Salud (OMS) lleva conmemorando desde 1987 para llamar la atención hacia la epidemia de tabaquismo y sus efectos letales. En la edición de este año, bajo el lema Comprométete a dejarlo, quiere ayudar a todas aquellas personas fumadoras que quieren dejar de fumar. Aquí puedes ver el video de la campaña:


Hay que tener en cuenta que fumar es la principal causa de muerte evitable en el mundo. Solamente en España produce más de 50.000 muertes al año. Todas las personas adultas sabemos que es malo para la salud y la inmensa mayoría de personas fumadoras desearían dejar de hacerlo. 

En general, los y las adolescentes también son conscientes del riesgo que conlleva el tabaco. Según la encuesta ESTUDES, el 93,8% de los y las jóvenes españolas piensan que fumar habitualmente puede producir bastantes o muchos problemas. Esta percepción del riesgo es superior incluso a la que tienen respecto a fumar cannabis.

La mayoría de la gente que consume tabaco, por lo general comienza a hacerlo antes de cumplir los 18 años. En Asturias la edad de inicio del consumo se sitúa en los 14,3 años, por lo que es importante prestar atención y tener información para prevenir el consumo de tabaco en nuestros hijos e hijas.

En la actualidad la población juvenil hace uso de un número diverso de productos y dispositivos susceptibles de liberar nicotina (cigarrillos, cigarrillos electrónicos, cachimbas, mini cigarros/puros, etc.). Es importante que menores y jóvenes estén informados e informadas sobre los riesgos de su consumo ya que este es nocivo y más en un cerebro adolescente en pleno desarrollo.

En el Blog #Quenotevendanhumos, creado por varios planes municipales sobre drogas de Asturias, tienes consejos sobre cómo prevenir el consumo de tabaco de tus hijos e hijas. A continuación tienes algunos.

Adolescentes y jóvenes, por la etapa evolutiva en la que se encuentran, pueden sentir atracción por el tabaco por mucho motivos: actuar como si fueran mayores, asumir riesgos, porque lo hacen sus amigos y amigas, etc. Pero en las familias se puede prevenir el consumo de tabaco siguiendo estas indicaciones: 

Habla sobre los riesgos del consumo de tabaco desde que son pequeños y pequeñas. A su alrededor es muy probable que vean personas fumando y es bueno ir hablando sobre ello, adaptando el lenguaje y los mensajes a su edad. 

Pregúntale a tu hijo o hija qué opina sobre el tabaco o qué piensa de las personas que fuman.

Escucha sus opiniones con atención. Es importante intentar no juzgar ni reprender. Fomenta el pensamiento crítico. 

Habla sobre cómo puede responder a sus amistades si le presionan para que consuma tabaco. Además de decir "no", ofrécele otras posibles respuestas.

Da un buen ejemplo. Si tú fumas hay más probabilidades de que tu hijo a hija comience a fumar. Lo más adecuado es que no fumes: Eres un modelo para tus hijos e hijas y aprenderán y reproducirán todo lo que tú hagas. 

Establece reglas claras sobre el consumo de tabaco tanto en casa como fuera de ella, y explícale el porqué.

En el caso de que fume, puedes hacer lo siguiente:

No te enfades, es muy importante que te comuniques con él o ella. Intenta saber qué es lo que le parece atractivo de fumar, cuándo lo hace, con quien, qué fuma...

Mantente firme con las reglas que se establecieron en casa sobre el consumo de tabaco.

Si dice "puedo dejarlo cuando quiera" dile que te lo demuestre. En el caso de que lo deje, refuerza esa decisión.

Háblale sobre los efectos a corto plazo: menos dinero para gastar en las cosas que le gustan, dificultad para respirar, mal aliento, dientes amarillos, ropa con olor desagradable, etc.

También sobre los beneficios de no fumar: libertad, mejor estado físico, mejor aspecto, etc.

Si quien fuma eres tú, una de las cosas más importantes para tu salud y la de tu hijo o hija es dejar de fumar. Aunque le transmitas que fumar no es sano, si tú fumas estarás enviando un mensaje contradictorio: "Y si es malo, ¿por qué tú fumas?". La respuesta a esa pregunta es muy difícil. Recuerda que somos un modelo para nuestros hijos e hijas: Aprenderán, repetirán y adquirirán todos aquellos comportamientos que tú hagas. Sé un buen ejemplo para ellos y ellas: Decide dejar de fumar hoy mismo. Si tienes interés en hacerlo, puedes ponerte en contacto con el Plan Municipal sobre Drogas en dro.depen@oviedo.es o en el teléfono 985 98 18 08.

Si en casa hay alguna otra persona que consuma tabaco, todas las personas del hogar son fumadoras pasivas. La exposición al humo de tabaco perjudica de forma importante la salud de las personas, incluso de las que no fuman.

Esto ocurre aunque se fume al aire libre, en la ventana, terraza o solo en una habitación de la casa con la ventana abierta. Las sustancias nocivas que se desprenden quedan impregnadas en la ropa, paredes, alfombras..., en todos los lugares donde se ha fumado con anterioridad. Así que, ni siquiera fumar en la cocina con la ventana abierta o solo fumar en la calle mantiene a nuestro hijo o hija libre del tabaco.

Tienes más información sobre el tabaco y otros productos relacionados con su consumo como los cigarrillos electrónicos, así como información sobre mitos y recursos útiles en este enlace.



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